En ocasiones las madres se convencen poner a sus hijos con otros niños en lo que se llaman «grupos de juego» o «Jardín de la Infancia» porque quieren que los pequeños aprendan a compartir. A veces, la madre cree que esto no lo puede aprender en casa, con ella. Aprender a compartir es un objetivo valioso y admirable. Pero los niños de dos y tres años no están listos para compartir nada. En lugar de ello, defenderá sus pertenencias contra todos y cada uno de los que los que vengan a ellas. El «grupo de juego» sólo permanece civilizado si cada madre permanece al lado de su hijo y lo protege de los otros niños en el grupo. El «compartir» sólo se da cuando la madre toma de las obstinadas manos de su hijo, el preciado tractor de juguete, y lo pone en las manos de otro niño, quien entonces lo sujetará con su vida hasta que su madre le diga que ya «compartió» el juguete por tiempo suficiente y entonces será devuelto a su pequeño y muy ansioso propietario. Si la escena anterior sucede sin una madre con cada niño, entonces el resultado es mucho peor. Sin su madre a un lado, el niño simplemente peleará para conservar su juguete, o será vencido por un niño más grande o más agresivo. Aprenderá a luchar o a huir. ¿Es esto socialización?
Procura que tu hijo pase más tiempo contigo cada día, y menos tiempo con otros niños pequeños. Se consiste, justo y honesto en todas tus interacciones con tu hijo. En unos meses tendrás a un niño más maduro, amable y dispuesto a ayudar, pero, aún mejor, estarás pasando un tiempo precioso con un compañero maravilloso que te amará y apoyará por el resto de tu vida.